La Regla de Oro de los Consejos

Un cosejo sobre los consejos

Así, de entrada, lo ideal es que no haga demasiado caso de los consejos de expertos, mayores, sabios, intelectuales, comités, informes, asesores, profesionales, especialistas, técnicos, profesores, académicos, autores, así como de autoridades en general, y en especial las de mayor rango. Todos son valiosos también como material para el ejercicio intelectual, pero poco más. Todos, no solo los creativos del marketing, tienen tendencia al sesgo, a la exageración ya la manipulación por intereses a veces tan ocultos que ni los propios creadores de la información son conscientes de ello.

Piensa por tí mismo, no te creas nada sin ponerlo antes en tela de juicio. No lo olvides, este será probablemente el mejor consejo que oigas nunca.

¡Ah! Se me olvidaba, tampoco hagas caso de lo que un servidor aconseja en este blog, porque aunque de vez en cuando y sobre algunos temas creo ser más listo que otros, soy tan falible sobre algunos asuntos como cualquiera, ya menudo me ciega el orgullo, como a los demás.

O sea, que te toca entrenar tu -buen- juicio.

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